
De Iker Casillas no ha querido decir nada, aunque después de confesar que es impuntual y que precisamente por ello no le saca de quicio la gente que llega tarde a los sitios, ha dicho que todavía quedan muchísimas horas para que llegue su boda con Iker Casillas.
Iker Casillas y Sara Carbonero durante sus vacaciones de verano
Boda de momento no entra en sus planes. "Me faltan muchas horas para casarme. No, no, me pongo hasta roja", decía sonriendo con cierta vergüenza mientras se tocaba las mejillas con las manos. Más tarde apuntaba que evidentemente el día de su enlace llegará tarde: "¿Ese día hay que ser impuntual dicen, no?".
Iker Casillas y Sara Carbonero durante sus vacaciones de verano
Boda de momento no entra en sus planes. "Me faltan muchas horas para casarme. No, no, me pongo hasta roja", decía sonriendo con cierta vergüenza mientras se tocaba las mejillas con las manos. Más tarde apuntaba que evidentemente el día de su enlace llegará tarde: "¿Ese día hay que ser impuntual dicen, no?".