El año ha comenzado con muy buen pie para Iker Casillas, que no para de cosechar victorias sobre el terreno de juego. Además, fue homenajeado en Móstoles, localidad madrileña en la que ha vivido gran parte de su infancia, donde le han puesto su nombre a una de las calles más transitadas. A esto se une que el futbolista del Real Madrid fue elegido por cuarta vez consecutiva el mejor guardameta del mundo.
Si en el terreno profesional no puede pedir más, en el sentimental también disfruta de un magnífico momento junto a la periodista Sara Carbonero, con la que podría dar cualquier día de estos, el paso de formalizar su relación pasando por el altar.
Ya viven juntos desde hace tiempo y su relación es inmejorable. De hecho, se acaban de comprar un chalet en la exclusiva urbanización de La Finca, en Pozuelo de Alarcón. La vivienda, de cuatro plantas, es de segunda mano y todavía se encuentra en reforma, motivo por el que aún siguen residiendo en Boadilla del Monte, pero cada cierto tiempo visitan las obras para ver si todo va según sus planes y sus deseos.
En uno de estos días en los que se acercaron hasta la que será su nueva casa fueron fotografiados saliendo de la urbanización en el coche que era conducido por el propio guardameta. A su lado Sara, que al igual que Iker tiene puestas muchas ilusiones en la que será su nueva casa, puesto que además de tener cerca a algunas buenas amigas (Ana Antick y Raquel Perera) van a encontrar la privacidad que no tienen en su actual residencia.
Según publicaba la semana pasada la revista QMD!, su nueva casa les habría costado 1.800.000 euros y además de 480 metros distribuidos en cuatro plantas, tendría piscina, un gran jardín y la intimidad que tanto ansían y que no encuentran en la casa en la que ahora residen.
Además, tiene espacio suficiente y habitaciones de sobra por si algún día deciden ampliar la familia. Entre sus nuevos vecinos, se encuentran Cristino Ronaldo, Kaká y Mourinho. Vamos, casi como en Valdebebas...
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